La producción del grafeno no existe como tal en la naturaleza, sino que se produce en un laboratorio a través del procesamiento del grafito o mediante metodologías de deposición química en fase de vapor. La complejidad de su proceso permite obtener un material de gran calidad, pero con un volumen de producción muy bajo.
Las baterías de grafeno se pueden llegar a utilizar para motos eléctricas, teléfonos móviles y también para coches eléctricos. Además, en el campo de las energías renovables se puede potenciar su uso en el caso de la energía solar, ya que podemos introducir el grafeno en las placas solares para poder incrementar su eficiencia a la hora de producir mayor cantidad de energía.
Y… ¿Cuáles son algunas de las ventajas y desventajas del grafeno?
Una de las ventajas que podemos destacar respecto al resto de baterías es que permiten trabajar a temperaturas mayores, suponiendo una solución para mejorar la vida útil de los coches eléctricos. Otras que podemos destacar son:
- Debido a sus propiedades, podemos realizar casi todo tipo de aplicaciones de forma más eficiente.
- Tiene mayor duración que el acero a pesar de ser más elástico y flexible.
- Tiene una vida útil 4 veces mayor que el litio.
- Al poder conducir la electricidad y la temperatura se deriva en numerosos usos.
Algunos de los inconvenientes:
- Aunque los investigadores intentan descubrir todos los usos potenciales del grafeno, no es un material mágico y en la práctica no se aplica todo lo que descubren.
- Existen dificultades para sus aplicaciones comerciales, aunque existan más de 60.000 artículos científicos que estudian este material.
- Es un material inestable y tratarlo y trabajar con el no es algo sencillo.
El grafeno es un material que se tendrá que seguir estudiando para poder utilizarlo sin problemas a largo plazo.
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