Durante las campañas de Black Friday y Navidad, las empresas de logística y transporte gestionan cerca de 108 millones de envíos de paquetes. Según la Organización Empresarial de Logística y Transporte de España (UNO) se realizan una media de 3,7 millones de envíos diarios llegando a alcanzar picos de hasta 4,8 millones.
Estas campañas suponen para el sector logístico un 40% de la actividad de todo el año, pero los beneficios que esto reporta para consumidores y empresas tienen un alto coste medioambiental por el uso exagerado de plásticos y envoltorios.
¿Qué medidas podemos llevar a cabo para lograr una logística sostenible y más responsable?
- Reciclar: es importante emplear materiales reciclados y reciclables para los embalajes. Una gestión adecuada contribuye a la reducción de desechos y al ciclo sostenible de los materiales. El packaging menos contaminante y el más utilizado es el cartón en un 77%, seguido del plástico con un 34%. De igual forma, los operadores logísticos deben implementar políticas de gestión de residuos eficientes en sus centros de investigación.
- Entregas flexibles: facilitar al cliente la opción de entrega flexible para que pueda estar al tanto en todo momento sobre dónde se encuentra su pedido mediante notificaciones por email o SMS. También se puede optar por la opción de entregas verdes y rutas eficientes ya que una buena gestión es esencial para reducir las emisiones de carbono.
- Flotas de vehículos sostenibles: adaptar las flotas a vehículos eléctricos o híbridos contribuye significativamente a la reducción de las emisiones contaminantes. Este tipo de transporte disminuye la contaminación acústica y libera espacio en las ciudades gracias a su reducido tamaño.
- Digitalización y uso de nuevas tecnologías: haciendo uso de sistemas digitales para la gestión de inventarios, rastreo de envíos, documentos y otros procesos, se reduce el uso de recursos como el papel y la tinta, permitiendo una mejor coordinación y comunicación en tiempo real. La digitalización y las nuevas tecnologías no solo mejoran la eficiencia, sino que reducen el desperdicio y mejoran la visibilidad de toda la cadena logística.
- Evaluación continua y mejoras: el establecimiento de indicadores clave de rendimiento (KPI) para evaluar el rendimiento sostenible y la realización de auditorías regulares aseguran que la empresa esté en camino hacia la sostenibilidad continua y la mejora constante.
Adoptando estas claves logramos una logística sostenible que no solo contribuye al bienestar del planeta sino a la creación de beneficios a largo plazo en términos de eficiencia, ahorro de cortes y reputación empresarial.
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